Ucrania. El destino emergente de Europa El Club Del Buen Turismo nov 29, 2017 Destinos Internacionales, Reportajes KIEV, UNA CIUDAD CON MIL ENCANTOS (I) Una sugerencia para 3-4 días. El 2018, con motivo de la final de Champions que tendrá lugar en el Estadio Olímpico de Kiev, marcará un antes y un después de esta ciudad y probablemente de todo el país. Patrimonio, naturaleza e historia son activos muy importantes para satisfacer a cualquier visitante. Es la ciudad con movimiento continuo y que nunca duerme. A tres horas de vuelo, Ucrania se convierte en un destino interesante para evadirse 3 o 4 días y volver con las pilas puestas. Con una superficie algo superior a España, el país tiene atractivos suficientes para cubrir cualquier expectativa: posee un elenco de edificios de alto valor histórico, una paisaje excepcional y variado, ríos navegables, desarrollo científico y cultural, dinamismo empresarial y de negocios, gente amable y acogedora, vida nocturna y ocio, estaciones de esquí, turismo rural, artesanía, etc. Te proponemos en estos reportajes una escapa de 3,4 días para iniciáticos y centrados en la Ucrania occidental: Kiev, Lviv, Iwano-Frankiwsk y una parte de los Cárpatos en el territorio de Yaremche y la estación de Ski de Bukovel. Kiev, o Kyiv en ucraniano, es una ciudad cosmopolita con una vida que bulle a borbotones y se nota en el comercio, la construcción, los negocios, la cultura, la noche ,… todo va a gran velocidad. Sus orígenes se remontan al siglo V y debe su nombre a uno, Kiy, de los 4 hermanos; en 1982 celebraron por todo lo grande el 1500 aniversario de su fundación y erigieron a la orilla del rio Nieper la estatua de los cuatro hermanos fundadores. Desde sus inicios fue un núcleo comercial por donde pasaban las caravanas del norte de Europa a Constantinopla. En ese trasiego de culturas se ha ido configurando la actual ciudad , un renacer permanente sobre las ruinas que dejaban los nuevos invasores: eslavos , jázaros, vikingos… y sobre todo la invasión mongola en 1240 que dejó la ciudad sin relieve económico. Su momento de mayor esplendor lo alcanzó entre los siglos X y XII llegando a ser una de las ciudades más grandes del mundo. En tiempos más cercanos ha estado bajo dominio lituano, polaco o formando parte de la repúblicas socialistas soviética hasta su independencia en 1991. La segunda guerra mundial que se cebó en toda Ucrania, fue especialmente dura en Kiev que quedó prácticamente destruida. La gran parte de las edificaciones que se encuentran en la mayor parte de las avenidas fueron levantadas a partir de 1945. Kiev resulta una ciudad amable tanto por su planificación como por el entorno, pues el 60 por ciento de su superficie está cubierta por parques y jardines. Se diferencian claramente dos zonas delimitadas por el rio Dnieper, la orilla derecha (Oeste) levantada en suaves colinas y la que constituye la ciudad patrimonial e histórica y la orilla izquierda donde está creciendo la ciudad con las edificaciones de nueva planta y convirtiéndose en zona residencial. De día, la vida se mueve en torno a la Plaza de la independencia (Plaza Maidan) y su arteria principal, la avenida de Khreshchatyk. En un entorno de un kilómetro se encuentran casi todos los referentes de Kiev: el parlamento, el ayuntamiento, el estadio del Dynamo de Kiev, los grandes almacenes, los establecimientos de las grandes marcas, etc. De día, básicamente es el polo de atracción de turistas y paseantes de la ciudad. Debajo de la superficie, la plaza alberga un sinfín de galerías comerciales, de modo que, bien cuando arrecia el frío, o bien cuando sube el calor en los meses de verano, se convierten en un refugio para pasar el tiempo , comprar o tomar un café a una temperatura aceptable. Edificios religiosos Kiev está plagado de edificios religiosos, incluidos monasterios, catedrales e iglesias. En casi todas ellas prevalece el estilo bizantino y se distinguen incluso de lejos por su cúpulas doradas y en forma de bulbo que hacen que reluzca más el sol y evitan la acumulación de nieve. Muchas de ellas se inspiraron en Constantinopla, Cualquier viajero se sorprenderá de la vida que hay dentro de las iglesias. Siempre hay gente rezando, aun fuera de las ceremonias programas, y gente de todas las edades y sexos. Hay un ambiente muy acogedor: santos , esculturas y frescos por todas partes, capillas por todo el perímetro de la iglesias, sepulturas de antepasados, generalmente próceres insignes, aromas de incienso, mujeres con la cabeza cubierta, hombres comprando y encendiendo velas…, unos arrodillados en la nave central y otros en un ir y venir a diferentes capillitas como si se encomendaran a su santo preferido. Y, cuando hay liturgia, la actividad se multiplica, la iglesia prácticamente se llena y los sacerdotes ofician la liturgia ortodoxa. La iglesia, en un estado laico, tiene un poder decisivo que transciende en lo político y social. Incluso en la contienda entre Rusia y Ucrania tanto el prelado de Moscú como el de Kiev rivalizaban desde el púlpito en defender las propias causas de libertad política. Algunos de los monumentos no pueden quedar sin una visita. La catedral de Santa Sofía. Es sin duda el emblema de Kiev. La mandó construir Yaroslav entre 1017 y 1037 y sirvió de inspiración su homónima Santa Sofía de Constantinopla. Constaba de 30 cúpulas, 5 naves y 7 galerías. Fue tal su magnitud que no sea era centro religioso sino también política y cultural , pues en ella se coronaban reyes, se recibía a mandatarios extranjeros, se celebraban asambleas populares, disponía de la mayor b biblioteca del Rus de Kiev… Sin embargo , a lo largo de los años y mediante las diversas invasiones extranjeras, especialmente los tártaros y mongoles, la destruyeron prácticamente. Ha sido reconstruida por dos veces , una en el siglos XVII y XVIII y otra en el XIX, su reconstrucción ha mermado su tamaño y configuración pasando a 19 cúpulas y reduciendo las naves. Si, en cambio, se han recuperado unos 2500 m2 de frescos de los 5000 que había en su origen. Alberga la tumba de su fundador, aunque hay discusión si su cuerpo, a pesar de los estudios y análisis hechos, es el del propio Yaroslav el Sabio. Convento de San Miguel. Saliendo por la torre del campanario de Santa Sofía se divisa al final de la avenida el Convento de San Miguel. Aunque tiene todo el aspecto de una iglesia bizantina , en realidad se trata de una reconstrucción efectuada en el 2000. La iglesia original data del siglo XII, tenía 5 naves y sus cúpulas eran de oro; apenas queda, salvo algunos iconos, nada de la original. En la misma plaza y delante del monasterio hay un conjunto de tres esculturas; una de ellas representa a san Cirilo, el autor del abecedario que lleva su nombre y que es el usado en el idioma ucraniano. El monasterio de las Cuevas (o La Kyiv Pechersk Lavra) es, junto con Santa Sofía una de las joyas de Kiev, por algo fue declarado patrimonio de la humanidad en 1990. Sorprende su tamaño y, sobre todo, la gran riqueza de elementos arquitectónicos como los cúpulas bañadas de oro, los vitrales y todo el sistema de túneles subterráneos que guardan la historia. Iglesia de San Andrés. Es otra de las iglesias de referencia de la ciudad y esta erigida en honor del apóstol Andrés que llegó hasta estas tierras a predicar el evangelio y dice la leyenda que en el terrero de esta iglesia clavó una cruz y predijo que esta ciudad se convertiría en una de las grandes del cristianismo. Esta construida en barroco-ruso y con sus cúpulas en forma de las tradicionales peras doradas. Esta situada en la cuesta de San Andrés , en un loma que mira al río , al lado del conocido mercadillo y en la misma calle que alberga también el castillo/palacio Ricardo Corazón de León. A 40 metros de la iglesia hay una escultura en bronce que encarna la figura de un hombre, un truhán pobre y mujeriego y una mujer poco agraciada , pero de buena posición económica, con la que pretendía casarse, al mismo tiempo que cortejaba a otra guapa y pobre. Está siempre concurrida no sólo por su simbolismo, sino porque corre la superstición que, dependiendo que parte del cuerpo le toques, da una suerte u otra. Ocio y gastronomía Kiev hierve tanto de día como de noche, pero son dos ambientes muy distintos. Si de día la gente se mueve por los negocios, el paseo o el trabajo, de noche, el ritmo parece inclinarse por ocio y el esparcimiento. La ciudad está llena de establecimientos para comer, beber o bailar. Como la cena comienza pronto, a partir de las 7 de la tarde, da lugar a una velada siempre prolongada hasta las 4 o las 5 de la madrugada. Hay bares y restaurantes para todos los gustos: los tradicionales ucranianos y los modernos o nuevas cadenas que ofrecen una propuesta más internacional. Ensaladas y carnes no faltan en ningún establecimiento. No son mucho de pescado y, el que suele estar en todas las cartas y menús, es el salmón. Aun en los establecimientos bien cualificados los precios son módicos y se puede cenar por 10-12 euros, bebidas aparte. La práctica totalidad de los vinos son de importación y sus precios están en torno a los 10-15 euros, pero hay muy buena cerveza y a precios populares. Las sopas y el cerdo son la base de la cocina de Ucrania y, por supuesto, también de Kiev. Las sopas se presentan en infinidad de variedades, aunque impera la de remolacha, las blinis, tortitas de maíz con carne o con arenques, son igualmente muy típicas. Los ucranianos elaboran muchos alimentos en forma de empanadas y hojaldres rellenas con carne, carpa u otros pescados generalmente de río. Por supuesto, se puede comer caviar y buena carne de ternera o buey. No falta el vodka, es habitual recibirte, y también despedirte, en el establecimiento con una copa de vodka. En Ucrania, como en España, hay multitud de establecimientos tanto para degustar comida local como internacional; algunas referencias: el O Panas o el Puzata Hata. Después de la cena, lo suyo es entrar en algún lugar de ocio. En cualquier hotel encontraréis sugerencias de toda la ciudad. Para una primera referencia, Arena , y su entorno, es un buen punto de partida, un conjunto de establecimientos (bares, restaurantes, pubs, discotecas…) que os dará ocupación toda la noche. El estadio Olímpico, Otro lugar emblemático para los amantes del deporte, y en concreto el futbol, es el Estadio Olímpico. El estadio está situado cerca del centro, en el Monte Cherepanov, por lo que se puede llegar a pie o en el metro sin necesidad de depender de coche u otro transporte. El año 2018 precisamente, y con motivo de la final de la Champions que se celebrará en este estadio, será el revulsivo adecuado para descubrir Ucrania y Kiev a nivel internacional. Acontecimientos de esta índole han servido, entre otras cosas, para dar a conocer los destinos donde se han celebrado y han propiciado un antes y un después para el mundo del turismo. Kiev no será una excepción. Hacer Comentario Cancelar Respuesta Su dirección de correo electrónico no será publicada. Nombre* Email* Sitio Web Comentario Currently you have JavaScript disabled. In order to post comments, please make sure JavaScript and Cookies are enabled, and reload the page. Click here for instructions on how to enable JavaScript in your browser.